Después de Blancanieves y los Siete Enanitos y Pinocho, y mientras Fantasía se estaba terminando, los estudios Disney inician muchos proyectos de películas de animación. Entre estos proyectos se encuentran los primeros borradores de películas que sí se estrenaron: Peter Pan , Alicia en el País de las Maravillas, La Dama y el Vagabundo, o incluso Mickey y las judías mágicas (ésta como cortometraje), y (lo que nos interesa) una adaptación de El Quijote.
Diseños de Bob Carr
La obra de Miguel de Cervantes es extremadamente difícil de adaptar a otros medios. La animación no sería una excepción . Eso, junto con los problemas financieros de la compañía tras Pinocho y Fantasía y el comienzo de la 2ª Guerra Mundial, detuvo el proyecto Los diseños de Bob Carr son de lo poco que ha quedado de este intento.
Diseños de Fernando Horvath
Posteriormente el proyecto se reactivaría en 1946 dirigido por Jesse Marsh (que hizo una destacable versión de Tarzán en cómic) e intentando adaptar el poema sinfónico de Richard Strauss.
Diseños de Jesse Marsh
Habría otros intentos en 1951 e, incluso en los años 90. A este intento pertenecen los bocetos de Sandro Cleuzo y John Watkiss (el autor del no-cómic en el que se basa el Sherlock Holmes de Guy Ritchie).
La versión de 1951
Diseños de Sandro Cleuzo
Diseños de John Watkiss
2 comentarios:
Precisamente el otro día comentaba con unos amigos que saldría de todo esto. ¿Habria happy ending? ¿Números musicales? ¿Una mascota susceptible de ser convertida en peluche?
Para el número musical podrían contar con un "cover" del tema de .
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